Ya hace un buen tiempo que empecé a ir a nadar. Empieza a quedar lejos aquel día que nadé 14 largos de dos en dos y con las pulsaciones disparadas. Pero no hay nada que no se pueda conseguir exigiéndose mucho a uno mismo, y sobre todo con mucha autoconfianza.
Hoy he cumplido otro de mis retos y es que el avance está siendo rápido. Tanto que el tiempo que invierto empieza a ser más de lo que pensaba. Por ello hay que nadar, y de continuo. Hoy, por primera vez he nadado los 40 largos en dos tandas de 20.
Es hora de mejorar la técnica.