Hoy llevaba en mente ir a Greenwich para ver qué había por allí. Y la verdad es que ha sido una mañana muy agradable. Lo primero ha sido coger esa línea DLR que no lleva conductor (es una sensación… igual que a la de llevar conductor), y luego, una vez en Greenwich ha empezado a llover. Así que todo tenía la pinta de que iba a ser un día pasado por agua, pero con un poquito de suerte, mientras visitaba el barco Cutty Sharp parece que lo peor ha pasado.
Visitar el barco no ha estado mal, cierto es que todo lo que es “demasiado turístico” me huele mal, pero lo que no está preparado me parece desaprovechado. En este caso está bastante bien la visita, tal vez un poco cara, pero es una actividad interesante, sobre todo para esos pequeños marineros que han (o hemos) leído unas cuantas historias de mar. Está reformado y aunque no es “demasiado viejo” como para formar parte de esas historias de los libros, sigue teniendo ese regusto de aventura, de tormenta, de motín a bordo, de abordajes (sufridos en este caso, supongo).
La verdad es que tenía ganas de ver el parque de Greenwich, pero no he podido disfrutarlo por dos razones: después de llover se tira al suelo el gato, y además había por ahí una cosa de los juegos paralímpicos, así que había calles del parque cortadas (caminos) y me ha costado bastante llegar al observatorio, he tenido que dar un rodeo elegante. El observatorio real es un pequeño museo donde también está el comienzo del meridiano cero. La verdad es que mucha gente no conoce el trasfondo debajo del meridiano cero, y tampoco conoce que por esos lugares pasaron un par de apellidos famosos como Halley y Newton, pero bueno, yo sí, y me ha gustado estar por esos lares (por cierto, Halley está enterrado ahí, y ni siquiera marcan el lugar mucho, de hecho hay un banco delante de la tumba… una pena).
Después de pasear, comprar algún recuerdo (me he comprado unos calcetines chulísimos, jajaja, a veces estoy un poco loco), me he bajado al centro de Londres porque después había quedado con el Sr. S. La idea era ver un par de cosas del British Museum, caminar por la zona de Angel e ir a ver el centro comercial de las olimpiadas (y el mirador del parque olímpico). Todo ha sido genial, y ha sido una gozada poder estar con el Sr. S, ha sido divertido, enriquecedor y “nice” como siempre. Y es que siempre es un placer estar con buena gente… ¡Gracias!
Aunque tengo alguna que otra historia que contar… hoy no tengo muchas ganas. La verdad es que me estoy encontrado con bastantes historias de “españoles por el reino unido”, pero merecen un capítulo aparte, y hoy no tengo ganas. Mañana… ya veré lo que hago. Seguramente visitar tiendas frikis y el Soho y las zonas de alrededor :)